Más vale tarde que nunca

Hace un par de semanas que uno de mis blogs favoritos, Deslenguado, ha cumplido un añito en la blogosfera. Les animo a visitarlo y dejarle una felicitación o una amenaza de muerte, dependiendo del humor con el que se hayan levantado.

Para muestra de su arte, un botón: la entrevista que Sombradoble, el alter ego de Deslenguado, le hace al susodicho autor. AQUÍ

Preguntas (para mí) aún sin respuesta

Fotos en coche. ¿Algún día saldrá algo mínimamente artístico?

- ¿Por qué las camisas/blusas de las mujeres llevan cosidos los botones en el lado izquierdo y los pantalones femeninos no?

- ¿Por qué el grifo del agua caliente siempre está a mano izquierda? ¿tendrá que ver con el color rojo, el comunismo o las izquierdas en política?

- ¿Por qué no se controla la entrada de líquidos en un barco? Si se hundiera un buque lleno de pasajeros, ¿acaso no sería una catástrofe?

- ¿Por qué nadie habla mal del Rey en la televisión? ¿Puede que, a día de hoy, sea la única manera de mantener un anacronismo del medievo?

- ¿Qué extraño fallo evolutivo hace que el ser humano continúe teniendo uña en el dedo meñique del pie?

300

Gatito, busca el palo

Llevo días iracundo después de ver 300. Mis acompañantes se quejaron al final del metraje por su excesivo preciosismo y su falta de cinematografía en estado puro. Quizá contaminado por estos enemigos de la grandilocuencia gráfica, acabé algo depresivo por esa vacuidad fílmica que denunciaban mis antes llamados amigos y poco a poco me infectaba hasta la purulencia. Sin embargo, con la ayuda de mi sinapsis ultradesarrollada, conseguí vencer esos pensamientos impuros y darme de nuevo al babeo compulsivo por esos 120 minutos de séptimo arte conjugado con informática y talento Milleriano.

Los espartanos se van de picnic, con su mantel rojo y su plato

Y es que, ¿para qué buscar pelo de perro en un gato?, o, ¿quién se atrevería a salir por una ventana, obviando la puerta bisagreante?, ¿acaso alguien se peina con el rallador? ¿o intenta meter el secador en la cerradura? Pues aquí y en Esparta tampoco. En este caso (y pongo énfasis en lo que digo, en ESTE caso) no hace falta una profundidad dialéctica platoniana, ni un argumento jeroglífico.

Me molan los piercings y las cadenitas chapadas de oro

Sólo el goce visual, los pelos erectos al sentir el aliento y las arengas de Leónidas, el apoyo irrenunciable de la falange espartana y una excelente dirección de fotografía (o debería decir iluminación por ordenador) hacen que 300 sea un espectáculo asombroso y, al fin y al cabo, mero reflejo del cómic. Vayan a verla y, si no les gusta, compren un rallador.

PS: Espero no haberla liado mucho por poner estas imágenes...

La muerte, si breve...

Atardecer en Menorca

Después de pedir la página 260 del Quijote rebozada y sin guarnición, Fermín se sintió tan sucio que corrió sollozando y a la pata coja hacia su casa. Allí se dio una ducha de salfumán, su bebida favorita. Sabía que el eclipse lunar no había sido nada más que el principio, pero desconocía que sus zapatos lilas le traerían más problemas en un futuro muy lejano. Decidió entonces poner fin a tanta desgracia y se inyectó silicona en los labios. Fue una pena que el nuevo rumbo que su vida había tomado se viera truncado al ser atropellado por dos mil ovejas, el pastor trashumante y su perro cuando iba de camino a la piscina municipal escuchando Mouth For War en su reproductor mp3.

Elogio del silencio

Resumen en imágenes

Ya que continúo con mi encefalograma plano y la ausencia de posteo, expongo las fotos de Cádiz (que hablan por sí solas) y la crónica que prometí publicar próximamente, se quedará en nunca. Disculpas a todos y a todas.

El homenajeado. Su mote es Gas, no pregunten porqué, el montaje lo dice todo.

Vestido de Legolas (Legaslo, para nosotros) en su trabajo. Listo para hacer el ridículo.



Subiendo al avión, destino Sevilla. Allí nos esperaban coches de alquiler directos a Cádiz.



Cambio de disfraz. Le tocó de Supergirl. Más ridículo.



El problema es que el ridículo lo acabamos haciendo los demás. Todos de Supermán. Encima, ni siquiera Supermán. Superhero. Viva la caspa.



Una caspa que triunfó bastante. Y es que 15 tíos azules y rojos llamaban la atención. Eso y el buen rollo reinante hicieron el resto. También influyó Juanito, pero esa es otra historia.